El Escenario

 


Soy de los que considera que en la vida se nos asigna el papel de actores o espectadores; … dejándonos una pequeña cuota de autodeterminación para decidir si la situación o la etapa en que estamos viviendo, nos va de contemplación o de protagonismo.

 

Personalmente, y sin llegar a dilucidar ese misterio que pienso no me será develado hasta el día que me perfeccione la muerte, llego a creer que por razones de búsqueda y de carácter, me ha tocado subir al escenario… de la vida misma.

 

Al ser consciente de ello, con los riesgos que supone estar en la mira del espectador, en las escasas circunstancias que logro esa independencia, consigo llegar a la esencia de mí mismo, al encuentro de mi propio ser: … y la búsqueda se torna más auténtica, más legítima.

Así, en ese camino que me lleva entre el drama y la comedia, entre el ensayo y la poesía, entre lo sublime y lo ridículo, voy sacando pedazos para armar mi propio rompecabezas, para terminar la obra maestra que pretendo hacer de mi propia vida…

Así de simple, así de complejo y así de pretencioso...